La soja, uno de los alimentos más completos por su contenido en calcio, potasio, fósforo, hierro, magnesio y flúor, se ha revalorizado durante los últimos años y sus beneficios para la salud se avalan desde ámbitos científicos.
Esta legumbre, fuente importante de proteínas, es muy rica en isoflavonas, unas sustancias similares a los estrógenos, hormonas sexuales de tipo femenino que ayudan a prevenir la osteoporosis y otros problemas derivados de la menopausia. La soja, fuente importante de proteínas, también reduce la acumulación de toxinas y ejerce como un potente antioxidante.
Además de sus efectos beneficiosos para el equilibrio hormonal femenino, unos gramos de esta leguminosa en la alimentación diaria contribuyen a rebajar los niveles de colesterol en la sangre, a flexibilizar los tejidos, así como a reducir el riesgo de enfermedades coronarias.