Drama humanitario

Décadas de conflicto en el Cáucaso se cierran en falso con el éxodo forzoso de los armenios del Karabaj

Los refugiados de Alto Karabaj llegan a Kornidzor

Es tentador dar por finiquitado un conflicto. Particularmente uno de los "conflictos congelados" que envenenan la vida en el Cáucaso desde hace décadas a causa de la disputa étnico-territorial que mantienen Armenia y Azerbaiyán por el Alto Karabaj, el enclave secesionista armenio en territorio soberano de Azerbaiyán. Poco más que una mota en el mapa, equivalente en superficie al área metropolitana de Barcelona, pero con tal valor estratégico, histórico y sentimental que ha dado pie a tres guerras, decenas de miles de muertos y un sinfín de iniciativas diplomáticas fallidas desde que ambos países recobraran su independencia tras el colapso de la Unión Soviética. Ahora la fuerza de Bakú ha hecho el resto. Los armenios del Karabaj se han rendido, una capitulación que ha dinamitado los equilibrios en la región y ha puesto en marcha lo que parece ser el principio del fin a siglos de presencia armenia en el enclave.