Armas de fuego

Errores inocentes, respuestas a tiros: la semana negra que confronta a EEUU con su realidad distópica

Unos niños prueban unas pistolas durante la celebración de la convención de la NRA, en Houston. / AFP / JUSTIN SULLIVAN

Ralph Yarl, un adolescente de 16 años, fue a buscar a sus hermanos gemelos pequeños a la casa equivocada. Kaylin Gillis, una joven de 20 años, se metió con unos amigos en coche por un camino privado erróneo. Una amiga de Payton Washington, una 'cheerleader' de 18 años, se había confundido de coche en el aparcamiento de un supermercado. Y a Kinsley White, una niña de seis años, se le escapó la pelota de baloncesto con la que jugaba con otros niños en la calle al jardín de un vecino. En prácticamente cualquier lugar del mundo, cuatro episodios tan intrascendentes nunca llegarían a las noticias. Pero los cuatro han sucedido, en seis días, en Estados Unidos, y en los cuatro las respuestas a los errores inocentes fueron disparos. En el caso de Gillis le costaron la vida.