La dependencia de EEUU

La "autonomía estratégica" de Macron agrieta la unidad europea

Las declaraciones del presidente de Francia tomando distancias con Washington en el conflicto entre China y Taiwán abren una nueva brecha entre los socios europeos

El presidente francés, Emmanuel Macron, durante un coloquio en la universidad Sun Yat-sen, el pasado 7 de abril. / GONZALO FUENTES / REUTERS

No es la primera vez que las palabras del presidente de Francia, Emmanuel Macron, o su forma de interactuar, levantan ampollas en la Unión Europea (UE). En noviembre de 2019 llegó a decir que la falta de liderazgo estadounidense --el multimillonario Donald Trump ocupaba en aquel momento la Casa Blanca-- estaba provocando la "muerte cerebral" de la Alianza Atlántica. Unos meses antes, y pese a la exclusión de Rusia del G8 (ahora convertido en G7) por la anexión ilegal de Crimea, abría las puertas de su residencia de verano al presidente ruso, Vladímir Putin, para hablar de los desafíos globales sin informar al resto de colegas europeos generando un profundo malestar. Sin embargo, pocas veces sus declaraciones habían abierto una brecha tan instantánea como en los últimos días, tras su viaje oficial a China y su reunión con el presidente chino, Xi Jinping