La conexión ultra del Kremlin en España

Están anotadas como asociaciones distintas e independientes en los registros; sus fechas de fundación son diferentes, dispares sus dirigentes, domicilios y ámbitos geográficos de interés, pero han estado utilizando una misma vieja cuenta corriente para sus actividades en España. La cuenta, funcional desde 2012, se abrió en una sucursal de Banesto del madrileño corredor del Henares y fue absorbida por el Santander. Siempre con terminación final 8271, ha sido utilizada los últimos años para la captación de fondos por las plataformas Vostok Solidaridad Donbás y Solidaridad Kosovo España, ambas con apoyo de la asociación Blagoe Delo de Madrid. A la vez que gestionan ayuda humanitaria, la primera y la tercera difunden los postulados prorrusos en la guerra de Ucrania; la segunda denuncia una persecución a los cristianos serbios en Kosovo. El Donbás ucraniano es punto principal de interés exterior ruso en este año de guerra. Y Kosovo y su intermitente desestabilización cierran la pinza, a través de Serbia, de la geoestrategia del Kremlin en Europa. Las tres entidades que orbitan la cuenta 8271 comenzaron a florecer a partir de 2014, tras la anexión rusa de Crimea. Las tres tienen dirigentes conectados con la acción exterior del Kremlin y –como ya adelantó EL PERIÓDICO- seguidos por un público fiel a la propaganda de Putin en España: neofascistas, negacionistas, antivacunas, aficionados a las teorías de la conspiración... Un sustrato antisistema de extrema derecha muy activo en redes sociales y el creciente negocio de las webTV... y con activistas presentes incluso en Ayuntamiento de Barcelona. En los manuales de procedimientos de acción exterior de la URSS, los mismos que en su juventud se estudió el agente del KGB Vladimir Putin, a entidades de este tipo “los llaman ‘organizaciones de avanzada’ –explican fuentes de la Seguridad del Estado- y han sucedido en las redes sociales a lo que antiguamente en las ciudades surgía en torno a clubes de amistad hispano-soviética, o de literatura rusa o de hermandad comunista…”. La acción proselitista rusa en el exterior tiene un patrón común desde antes de la caída del muro: una causa caritativa que promover –y que en otros países a veces se ha utilizado de pantalla-, creación o absorción de entidades relacionadas con esa causa, captación de solidarios, organización de viajes, hermandad, creación de una red de comunicación… Regimiento Inmortal Con estandartes de la hoz y el martillo y cintas naranjas y negras de San Jorge, que representan al ejército ruso, Blagoe Delo (Gesto de Bondad) es la entidad que cada 9 de mayo organiza en Madrid la Marcha del Regimiento Inmortal, conmemoración de la victoria soviética sobre el nazismo. La última registró en Madrid enfrentamientos entre manifestantes y público ucraniano congregado en las aceras. El dirigente de Blagoe Delo, Roman Demyan, es originario del Donbás rusófilo, lo que Moscú llama Novorrusia. Al comienzo de la guerra de Ucrania, y al igual que las instrucciones que daba la embajada rusa a sus ciudadanos, la entidad se dirigió a los expatriados rusos en España ofreciendo defensa jurídica para casos de ataques rusófobos… que finalmente no se han dado en este país. Antes de la guerra, a sus eventos sociales y conciertos acudían siempre diplomáticos rusos. Difunde y participa en las marchas del Regimiento Inmortal la más destacada propagandista de la invasión rusa de Ucrania, Liu Sivaya. Su última línea narrativa en Twitter consiste en advertir de que más entregas de armas occidentales a Kiev “supondrán una amenaza más de la OTAN a Rusia que podría llevarnos a todos directamente a la Tercera Guerra Mundial”. Blagoe Delo ha organizado envíos de material humanitario a la parte prorrusa del Donbás en las que llama “Misión ambulancia”. En la edición de 2018 participó Vostok Solidaridad Donbás como entidad colaboradora, y viceversa en otros envíos organizados por esta otra plataforma. Cristianos al rescate “Ayudar a la autosuficiencia de la población serbia en el enclave de Kosovo” es uno de los objetivos de Solidaridad Kosovo España, entidad gemela de otra del mismo nombre que opera en Francia. Ambas tienen en su origen a un activista nacionalista proserbio, Nikola Mirkovik, fundador en París de Solidarité Kosovo y en Madrid de Solidaridad Kosovo, rodeada de lepenistas la primera, y aplaudida por los neofascistas españoles la segunda. A ese sector se ha dirigido el dirigente español de la entidad, Roberto Ávila, en actos organizados por formaciones como Bloque Joven Jaén o la alicantina Haciendo Nación, que recogen restos del piélago neonazi en España. Hoy no choca que, pese a esos detalles, Ávila haya sido entrevistado por el diario Pravda, o que la Feria de Libro de Belgrado le invitara a presentar su obra “Kosovo, la gran partida”. Su campaña “SOS Cristianos en los Balcanes” –parte del argumentario KIS (Kosobo is Serbia) y con sostén de la Iglesia Ortodoxa-, explicaba en coloquios “la expulsión de los cristianos y la creación de la mayor escuela de yihadismo de Europa”, como explican sus invitaciones. La entidad ha montado seis Misije Solidarnostza Kosovo, caravanas de envío de ayuda. En julio de 2019, la Misión ‘Kosovo no se Rinde’ recogía donativos en la misma cuenta bancaria 8271. Activista destacado A comienzos de 2016, solo semanas después de la presentación en Barcelona de una Asociación Cultural Amigos de Novorrusia, se celebraba en el campus de Toledo de la Universidad de Castilla-La Mancha un coloquio sobre Siria, Kosovo y el Donbás. Publicitaba el acto un blog del neofalangismo, Pueblo Indómito. Era la primera vez que participaban juntos en un acto público el proserbio Roberto Ávila y Enrique J. Refoyo, fundador de Vostok Solidaridad Donbás, la más activa de las tres asociaciones hermanadas por la cuenta 8271. Refoyo, politólogo y activista prorruso, es el traductor en España de Alexander Duguin, padre del nuevo ultranacionalismo ruso y de la teoría del eurasianismo. Uno de sus encuentros con este ideólogo de cabecera de Putin ha tenido lugar en un coloquio organizado por el RISS (Instituto Ruso de Estudios Estratégicos). El director de ese instituto, Mikhail Fradkov, fue jefe del SVR, el Servicio de Inteligencia Exterior ruso. El RISS también ha invitado a actos en Moscú a Nikola Mirkovik y a activistas de la extrema derecha francesa, tan populares entre sus audiencias de internet como Refoyo entre las suyas de España. Al habla con EL PERIÓDICO, Refoyo niega que su organización tenga relación con el Kremlin, y rehúye cualquier clasificación política: “No me interesa esa división entre izquierda y derecha. Yo escribo y la gente me lee”, dice. Si su público, y los seguidores de Duguin, son neofascistas “es porque este es un espacio que ocupa el primero que llega. Si los demás lo dejan vacío…”. A este politólogo rusófilo lo llaman para opinar el canal RT en español (clausurado aquí desde que empezó la guerra), o el canal ultraderechista 7NN, donde comparte espacio herziano con el teniente coronel Francisco Bendala, reconvertido en opinador. Su último hallazgo: “La Casa Real, el Gobierno y el CNI nos traicionan y trabajan para Marruecos”. Así se lo tituló el canal webTV de Espíritu Templario repicando un vídeo de 7NN. Las apariciones de Refoyo son repicadas también por chats de Telegram y canales de Youtube como Espíritu Templario, con 19.000 seguidores, u otros, como Frente del Este (8.186 seguidores) que, con sus contenidos, burlan el bloqueo de la UE a la desinformación rusa, el mismo bloqueo que llevó a las autoridades a cerrar la emisión en Europa de los canales rusos RT y Sputnik. Reproducido por esa pléyade bulliciosa de activistas de extrema derecha fue un acto público con Refoyo como orador. Día: 27 de mayo de 2022. Organizador: Davy Rodríguez, influencer de la nueva extrema derecha. Como tema, un asunto antiglobalista y anti Unión Europea: España y la reconquista de su soberanía. Lugar: el hotel Reconquista de Oviedo. Wagner en Torrejón La última caravana con destino al Donbás organizada por la plataforma de Refoyo partió hacia el Donbás el pasado 4 de mayo con el nombre “Misión Humanitaria Novoazosk Mariupol”. La iniciativa fue publicitada en redes sociales por el perfil KrasnyySkorpion (Escorpión rojo), dedicado a la difusión de partes de guerra rusos para “combatir la desinformación occidental”. Entre los seguidores del escorpión están desde las CUP y el Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE) hasta el coronel Pedro Baños y el intelectual ultraconservador César Vidal. La plataforma pro Donbás ruso y la entidad pro Kosovo serbio iniciaron públicamente su relación el 9 de noviembre de 2016, en una “cena solidaria” convocada por ambas entidades. El invitado de honor era Nikola Mirkovic, el activista de la causa eslava cristiana y serbia para Francia y España. Una hora antes de la cena, Mirkovic presentó su libro ‘El martirio de Kosovo’, prologado por José Javier Esparza, uno de los periodistas más conocidos de la extrema derecha española. Cenaron en un hotel en Torrejón de Ardoz. Hay cierta predilección del mundo eslavo por el Corredor del Henares, una conurbación de 16 municipios madrileños que se extiende desde Ajalvir hasta Guadalajara, con ciudades como Coslada, San Fernando y Alcalá. Es, con la provincia de Alicante, el mayor núcleo de residencia de expatriados rusos (y también ucranianos) en España. Por locales de Torrejón, confirman las mencionadas fuentes de la seguridad del Estado, han pasado “activos de Wagner” que han sido vigilados durante su estancia en España. Vista a la izquierda En el mundillo prorruso europeo hay puntos de confluencia entre la ultraderecha y la extrema izquierda, siempre a través de pequeñas formaciones. Comunista, y no neofascista o rojiparda, es la última iniciativa de apoyo a la población prorrusa del Donbás, lanzada la pasada semana por el Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE) para recoger fondos con los que canalizar “ayuda humanitaria al pueblo del Donbass”. Como antes lo fue Siria o Libia, el Donbás es una zona a la que viajan militantes de organizaciones extremistas de derecha e izquierda de toda Europa interesados (ellos o sus formaciones) en adquirir adiestramiento militar en combate. En algunos casos, el viaje de esos voluntarios internacionales tiene muy mal final. El PCPE y sus juventudes utilizan en su nueva campaña la misma cuenta, de Openbank y acabada en 3266, que hace tres meses usaron para otra cuestación: dinero para traer a España desde la zona de guerra las cenizas del combatiente comunista muerto en el lado prorruso de Donbás Alexis Castillo, alias “Alfonso”. Apoyaba la cuestación la plataforma comunista italiana Banda Bassotti, que también tiene militantes combatiendo en las filas prorrusas de la Ucrania ocupada. En enero pasado, esa organización italiana organizó una cuestación conjunta con la plataforma vasca Euskal Herria Donbass Komitea con el objetivo público de “recogida de fondos económicos para orfanatos del Donbass”, en una edición nueva (van ocho) de la “caravana antifascista”. Como en el caso de las organizaciones de extrema derecha, el ala izquierda del apoyo a Rusia en España monta paralelamente a las campañas solidarias otras exclusivamente políticas. Su objetivo definido es la oposición en todo tipo de canales a la OTAN, “el imperialismo occidental” y el envío de armas a Ucrania. La misma advertencia sobre que España se vea en guerra con Rusia -culpando al secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, y el PESC Josep Borrell- secunda repetidamente otro canal de la ultraderecha, NegociosTV: “Europa nos va a llevar a una guerra directa con Rusia antes del verano”, decía el 23 de enero su analista Fernando Moragón. Y secundaba el profesor de la conservadora Universidad San Pablo CEU Aurelio García del Barrio, en curiosa coincidencia con un temor expresado por Podemos el pasado viernes: “Nos veremos incluso enviando hombres, soldados españoles, luchando en una guerra en la que nos hemos metido sin estar invitados”.

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