Decisión audaz

Los primeros pasos del ambicioso plan de Petro para pacificar Colombia

  • El presidente realiza drásticos cambios en la cúpula militar y da luz verde para comenzar a negociar con la guerrilla ELN

  • También se propone llegar a algún acuerdo con las disidencias de las ex-FARC y los grupos narcoparamilitares

El presidente de Colombia, Gustavo Petro. / CHEPA BELTRAN (ZUMA PRESS / CONTACTO)

Una drástica renovación de la cúpula militar y el inicio de las negociaciones en La Habana con la guerrilla de origen guevarista que opera en Colombia desde hace casi seis décadas marcan el ritmo de los primeros 10 días del presidente Gustavo Petro. "Unas fuerzas militares en transición o en la paz si la alcanzamos, y ruego por que lo logremos, tienen que tener una prioridad: primero son el hombre y la mujer que el fusil", dijo este sábado durante una ceremonia en la que se presentaron los nuevos comandantes. Durante su toma de posesión había adelantado su hoja de ruta al asegura que las generaciones venideras recordarán al Gobierno de izquierdas como el de "la vida" y "la paz total". Frente a las nuevas autoridades castrenses insistió en la necesidad de avanzar decididamente por ese sendero. "Llo que no es positivo, es matarnos en una guerra fratricida que lleva siglos, una guerra perpetua". Para cumplir con ese objetivo superador ha decidido un cambio de 180 grados en las políticas que buscaron enfrentar los problemas de la violencia armada, en todas sus variantes, así como el narcotráfico y el paramilitarismo. Se trata, según el portal La silla vacía, una apuesta "ambiciosa", pero sin garantías de éxito. Si Petro lo logra, "habría un escenario de paz sin precedentes". De lo contrario, el horizonte se poblará de "grandes riesgos".