Refugiados

Externalización del asilo: modelos cuestionados y escasamente efectivos

Australia, Estados Unidos, Israel o la Unión Europea son algunos de los países y bloques que han dejado en manos de terceros países parte de su gestión fronteriza

Refugiados africanos, considerados ilegales por Israel, huyen de las autoridades migratorias de ese país a las afueras de Beersheva en una imagen de archivo del 2013. / Tali Mayer / EFE

El plan del Reino Unido para deportar a solicitantes de asilo hasta Ruanda está lejos de ser un experimento novedoso. Desde comienzos de este siglo varios países ricos han puesto en marcha fórmulas semejantes para externalizar el asilo y la gestión parcial de sus fronteras. La eficiencia de esos modelos ha muy cuestionada y los abusos contra los derechos humanos, frecuentes en algunos casos.