El primer ministro británico, Boris Johnson, visitó este viernes Kiev para reunirse con el presidente ucraniano, Volodimír Zelenski, en su segundo viaje a Ucrania desde que Rusia iniciase la guerra el pasado 24 de febrero.

El jefe de Gobierno británico, que no había anunciado su visita con antelación, canceló a última hora un discurso que tenía programado ofrecer esta tarde ante empresarios en el norte de Inglaterra para dirigirse a la capital ucraniana. Su visita relámpago llega justo después que este mismo viernes Bruselas haya acelerado el proceso para que se conceda al país en plena invasión el estatus de candidato a entrar en la Unión Europea (UE).

El mandatario británico ofreció a Zelenski durante su encuentro poner en marcha una "operación de entrenamiento" para las tropas ucranianas "con el potencial de entrenar hasta 10.000 soldados cada 120 días", detalló en un comunicado Downing Street, su despacho oficial en Londres.

El programa que propone el Reino Unido "podría cambiar de manera fundamental la ecuación de la guerra, asegurando que las Fuerzas Armadas de Ucrania tienen la resiliencia que necesitan para salir victoriosas", agregó la oficina de Johnson. Londres ya había contribuido desde 2015 a formar a cerca de 22.000 soldados ucranianos.

Johnson visitó Kiev por última vez el pasado 9 de abril para demostrar, mediante la promesa de enviar armamento, el apoyo de Londres al gobierno de Zelenski, que resiste desde hace cuatro meses al avance militar de las tropas rusas sobre su país en una operación centrada ahora en conquistar el Donbás, al este.

Su visita a Ucrania también coincide con la polémica aprobación de su gobierno de la extradición a Estados Unidos de Julian Assange, activista y fundador de Wikileaks, donde se enfrenta a una sentencia de hasta 175 años de cárcel por revelar al mundo los abusos militares cometidos por Washington.