El Kremlin considera que los suministros de armas occidentales a Ucrania, incluidas las armas pesadas, suponen una amenaza para la seguridad del continente europeo.
El comentario del portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, se sumó a un patrón de escalada de la retórica de ambas partes, ya que Occidente ha aumentado los suministros de armas a Ucrania y Moscú lo ha acusado de librar una guerra por delegación contra Rusia. "En sí, la tendencia a bombear armas, incluidas las pesadas, a Ucrania y otros países son acciones que amenazan la seguridad del continente y provocan inestabilidad", dijo Peskov a los periodistas.
Respondía así a una pregunta sobre las declaraciones de la ministra de Asuntos Exteriores británica, Liz Truss, quien dijo el miércoles que los países que se oponen a la invasión rusa de Ucrania deben redoblar su apoyo, incluido el suministro de armas pesadas, tanques y aviones.
Rusia, cuya invasión de Ucrania ha matado a miles de personas y ha desplazado a millones, ha retratado constantemente a la OTAN y a Occidente como agresores que la han obligado a defender su propia seguridad. El presidente Vladimir Putin dijo el miércoles: "Si alguien pretende intervenir en los acontecimientos en curso desde el exterior y crear amenazas estratégicas para Rusia que sean inaceptables para nosotros, debe saber que nuestros ataques de represalia serán rápidos como un rayo".