Análisis

Europa contra los ultras: nudos y grietas en el cordón sanitario

La candidata de ultraderecha francés Le Pen hace campaña en Soucy / SARAH MEYSSONNIER/REUTERS

Un fantasma recorre Europa, y no es el del comunismo, en horas bajas al menos en sus siglas tradicionales, sino el de la ultraderecha. En las últimas décadas el continente ha recordado la sacudida de los fascismos, que lo llevaron el siglo pasado a la guerra más destructiva que ha conocido la humanidad. ¿Qué hacer ante el crecimiento de las opciones políticas emparentadas con las fuerzas que provocaron ese enfrentamiento? No hay una respuesta común a esa pregunta.