Crisis en Europa del este

El sector agroalimentario español teme nuevos embargos si escala el conflicto Rusia-Ucrania

  • Los exportadores, preocupados por la posibilidad de restricciones comerciales como las que en 2014 que acabaron con las ventas de porcino y fruta a Moscú

  • El vino, el aceite y las aceitunas se encuentran entre los productos más amenazados por la tensa situación prebélica que se vive en la actual crisis

Producción de aceite de oliva en una empresa agroalimentaria española. / JOSÉ PEDROSA / EFE

El aumento de la tensión entre Rusia y Ucrania puede tener consecuencias imprevisibles para las vidas de miles de personas, para la política internacional y para el comercio mundial, pero hay otros efectos que son en cambio más esperables: Occidente ya ha avisado de que tiene listas sanciones “rápidas y severas” contra Moscú en caso de intervención militar, y ante ese tipo de medidas no suele tardar en llegar una respuesta recíproca. El precedente está muy fresco: en 2014, el embargo ruso contra productos agroalimentarios europeos en represalia por las sanciones de la UE ante la invasión de Crimea terminó prácticamente de un día para otro con las exportaciones de carne, frutas y hortalizas españolas a un mercado de 140 millones de consumidores. Las restricciones -que duran hasta hoy- han causado un desplome del 67% de las importaciones de alimentos españoles por Rusia, según datos del Instituto de Comercio Exterior (ICEX): sumaron 1.111 millones de euros en 2012, y 362 millones en 2020. Ahora, el temor en el campo español es que una nueva ronda de restricciones golpee a productos que se libraron del bloqueo hace ocho años y que además están funcionando bien en el mercado ruso.