Cumbre en Cornualles

El G-7 respalda el plan de Biden para rivalizar con China

  • Los países más desarrollados pretenden minimizar próximas crisis sanitarias y aprobar una alternativa a la Nueva Ruta de la Seda de China

  • Requerirá de una inversión de unos 30 billones de euros en dinero público y privado y ayudará a desarrollar países con pocos recursos de aquí al 2035

Foto de familia de la cumbre del G-7 con el anfitrión, el primer ministro británico, Boris Johnson, en el centro de la imagen. / HOLLIE ADAMS / EFE

Uno de los principales objetivos del presidente Joe Biden en esta cumbre es intentar hacer frente a la amenaza de China y de Rusia al orden mundial. Este viernes, los países del G-7 aprobaron, según la prensa británica, el plan de Biden para rivalizar con China. Biden quiere crear un proyecto alternativo al del cinturón y carretera que está desarrollando China y que emula a la antigua ruta de la seda e involucra a setenta países desde Asia del Sur hasta Europa pasando por Oriente Próximo. Es una iniciativa que lanzó en 2013 el presidente Xi Jinping y que involucra proyectos de desarrollo de infraestructuras de puertos, carreteras, ferrocarriles y digitales desde Asia hasta Europa pasando por África y al cual se han adherido más de 100 países. 

El proyecto de Biden se llama ‘Build Back Better World' (volver a construir un mundo mejor) y es la versión occidental de esta iniciativa. Requerirá de una inversión de unos 30 billones de euros en dinero público y privado y ayudará a desarrollar países con pocos recursos de aquí al 2035. “No se trata solo de confrontar o enfrentar a China, pero hasta ahora no hemos ofrecido una alternativa positiva que refleje nuestros valores, nuestros estándares y nuestra forma de hacer negocios”, dijo un funcionario estadounidense al diario ‘The Guardian’. Esta era una idea inicial de Trump que ha retomado Biden.  

Respuesta al covid

La declaración del G-7 que será publicada al terminar la cumbre también cuestionará la actuación de China con respecto a los derechos humanos (por permitir el trabajo forzado), y la postura de Taiwán con el covid por no permitir el acceso a su territorio de equipos internacionales de científicos para inspeccionar la situación de la pandemia. Se espera que sea muy parecido al comunicado que ya hicieron los ministros de exteriores del G-7. 

También se espera una condena a los ciberataques que se han producido en las últimas semanas contra objetivos estadounidenses y que el Pentágono calificó en su momento como “un acto de guerra”. Fueron dos ataques perpetrados mediante el ‘ransomware’, que bloquea los servicios informáticos y no los libera hasta que la compañía no paga un rescate, que suele ser millonario y con criptomonedas. Según el FBI los responsables fueron un grupo de piratas informáticos radicado en Rusia y llamado Revil. Biden critica a Rusia por permitir que los piratas informáticos operen desde su territorio. Para la semana que viene hay prevista una reunión entre el presidente de los Estados Unidos y le presidente ruso en territorio neutral suizo. Biden ya lanzó un mensaje a Putin nada más aterrizar en Inglaterra. “Le diré a Putin lo que quiero que sepa”, afirmó delante de soldados estadounidenses. Biden que tendrá más fuerza en esa reunión si cuenta con el respaldo de todos los países del G-7.