COMUNIDAD DE SUPERVIVIENTES

Centenares de trabajadoras domésticas son abandonadas frente a los consulados de Beirut

En el Líbano, miles de trabajadoras domésticas migrantes toman la iniciativa para retornar a sus países natales ante la indiferencia de sus gobiernos

Después de sufrir abusos y violencia, muchas optan por autoorganizarse y ayudarse las unas a las otras

Una empleada doméstica filipina pasea un perro en Beirut.  / AFP

A las puertas del consulado de Kenia se acumulan keniatas. En el de Etiopía, etíopes. En el de Bangladesh, bangladesís. En el de Filipinas, filipinas. Cambia solo la bandera y la zona de Beirut. Pero bajo otro triste sol de otoño esperan todas ellas. Mujeres sin presente ni futuro. Ahí, frente a los edificios diplomáticos africanos y asiáticos de la capital pasan las jornadas muchas trabajadoras domésticas en el Líbano. La crisis económica sin fin, la pandemia del coronavirus y la explosión del pasado agosto en la capital han abocado al país a la pobreza y a la destrucción de su clase media.