El milagro de Joe Biden

El candidato demócrata ha pasado en unos meses de tocar de la jubilación a acariciar la Casa Blanca

El ex vicepresidente de Obama ha dejado que Trump se desgaste tras demostrar más disciplina de la esperada

El candidato demócrata a la presidencia de EEUU, Joe Biden, en un mitin en Bristol, Pensilvania, este sábado. / REUTERS / KEVIN LAMARQUE

Parece que haya pasado una vida desde el mes de febrero, cuando el coronavirus era todavía una palabra extraña, el juicio político al presidente daba sus últimos coletazos y el inicio de las primarias demócratas acaparaba la atención política en Estados Unidos. Joe Biden hizo campaña en Davenport, una pequeña ciudad de Iowa. Unos pocos carteles medio enterrados en la nieve y un par de dibujos garabateados con el nombre del candidato anunciaban la entrada al mitin. Dentro había casi más periodistas que público, tan entrado en años que a uno de los asistentes le dio soponcio durante el acto. El vicepresidente de Barack Obama seguía siendo técnicamente el favorito para hacerse con la nominación, pero allí nadie se lo creía. No tenía chispa, público, ni mensaje y transmitía tanta fragilidad como una venerable porcelana a punto de romperse en mil pedazos.