CORRUPCIÓN EN RUSIA

Un barrio fantasma en la taiga siberiana

Antes de ser envenenado, Navalni desveló en Novosibirsk la estafa de Alekséi Djulai, un oligarca y concejal local que vendió cientos de pisos a medio construir, sin acabados ni infraestructuras

"No hay carretera, ni parques, ni hospital en el distrito; en invierno se cuela el hielo y nos sentimos estafados", se quejan los vecinos, que pagaron sus apartamentos por adelantado

El barrio fantasma de Pliushikhinski, en Novosibirsk. / MARC MARGINEDAS

Tatyana Guseeva arrastra a trompicones, por un camino semiasfaltado lleno de baches, la sillita con la que saca a pasear a diario a su hijo más pequeño. Tampoco es que exista mucho divertimento para menores en este barrio periférico de Novosibirsk donde reside desde hace más de un año. Rodeada de gigantescos socavoneshierba que literalmente alcanza a los mismos portales, ruidosas excavadoras horadando agujeros con permanencia, tuberías de calefacción pendientes de ser enterradas y edificios de baratos paneles unidos a toda prisa por un cemento que incluso rebosa de sus hendiduras, todo a su alrededor rezuma provisionalidad, hasta el punto de que se hace difícil imaginar que cientos de ciudadanos estén ya residiendo en estos apartamentos pagados por adelantado.