El terrorista de extrema derecha, Brenton Tarrant, compró a través de internet cuatro de las armas que utilizó en el ataque en el que mató a 50 personas, ha confirmado el propietario del negocio Gun City, David Tipple. En rueda de prensa, Tipple, ha afirmado que vendió cuatro armas de categoría A y munición en tres o cuatro operaciones separadas verificadas por la policía entre noviembre del 2017 y marzo del 2018.
La primera compra tuvo lugar el mismo mes en el que el australiano Tarrant, que actuó solo en el atentado terrorista, obtuvo el permiso de armas de las autoridades de Nueva Zelanda donde, según escribió en un manifiesto, se había trasladado para entrenarse para el ataque. Pero a pesar de esto, "no detectamos nada extraordinario sobre el titular de esa licencia de armas", dijo Tipple.
Ley de armas
El propietario ha asegurado que entre el material no figuraban las armas semiautomáticas que Tarrant utilizó durante el ataque y que retransmitió en directo a través de Facebook. "Vi el vídeo y vi el rifle (...) no era de ninguna de las tiendas afiliadas a Gun City", ha indicado Tipple.
En un comunicado, Gun City ha mostrado su "pleno apoyo" al anuncio de la primera ministra, Jacinda Ardern, de enmendar la ley de armas y ha ofrecido su colaboración para "garantizar que cualquier revisión y cambio de legislación evita otro incidente". Durante la rueda de prensa, Tipple ha evitado abundar al respecto al considerar que "no es día para abrir el debate sobre armas" y ha subrayado que esta discusión es lo que buscaba el asaltante.
Tarrant rechaza la defensa
Mientras tanto, Tarrant, ha rechazado a su abogado de oficio y planea defenderse solo por el asesinato de al menos 50 personas. El letrado Richard Peters ha dicho al diario 'New Zeland Herald' que ha dejado de representar a Tarrant, a petición del acusado. Peters ha indicado al periódico que el asaltante de 28 años, estaba lúcido, no mostró ningún tipo de arrepentimiento y que no le pareció que fuera mentalmente inestable más allá de expresar su ideario extremista.
Tarrant permanecerá en prisión provisional hasta el 5 de abril, cuando se espera que comparezca ante el Tribunal Superior neozelandés donde, según el abogado, buscará utilizar el proceso como altavoz de su ideología. "Sospecho que no evitará la publicidad y que este será la manera como afrontará el juicio. El trabajo del juez será dirimir con esto", ha dicho Peters.