El pasado 25 de enero en el municipio de Minas Gerais, una presa se rompió provocando 186 muertos y 122 desaparecidos, en una tragedia que cimbró al pueblo brasileño.
Los investigadores de dicho acontecimiento afirmaron que los directivos de Vale tenían conocimiento del alto riesgo que se corría y por esos fueron separados de sus puestos.
Antes de ello, la cadena 'O Globo' presentó la carta de renuncia de Fabio Schvartsman, quien había asumido la presidencia de la empresa en mayo de 2017, cuando sustituyó a Murilo Ferreira:
"Estoy absolutamente convencido de que mi actuación y la de los demás miembros de la dirección, a quienes se recomienda que se aparten de la empresa, fue absolutamente adecuada, correcta y, principalmente, fiel a nuestros valores innegociables de protección a la seguridad de las operaciones de la compañía", ratificó en su carta.
"Pero hay momentos en que es necesario sacrificar convicciones personales en beneficio de un bien mayor. Y este es uno de esos momentos, pues mi presencia en el comando de Vale pasó a ser percibida como inconveniente por autoridades (investigadores) que seguirán interactuando todo el tiempo con la compañía", sentenció.
Asimismo, todas las personas involucradas fueron retiradas del trabajo y no podrán tener contacto alguno con la empresa en lo que se realiza la investigación para dictaminar las causas de la tragedia.