Estos son los dos candidatos a la presidencia de Austria que se enfrentan este domingo en la repetición de la segunda vuelta de las elecciones.
VAN DER BELLEN, EL PROFESOR DE AUSTRIA
A sus 72 años, Alexander Van der Bellen representa la cara más amable y progresista de estas elecciones. Hijo de refugiados que huían de la barbarie nazi y soviética, el candidato ecologista a la presidencia apuesta por una mayor solidaridad con los inmigrantes y un mayor compromiso con la Unión Europea. A pesar de presentarse como independiente, Van der Bellen fue líder de Los Verdes desde 1997 al 2008. Eso, sumado a su condición de profesor de economía, refuerza su experiencia como figura de consenso, pero también es visto con recelos por los que critican al 'establishment' y denuncian su “superioridad moral”.
HOFER, EL ULTRA CON PIEL DE CORDERO
A pesar de ser considerado la cara amable de su partido, Norbert Hofer ha hecho gala de un fuerte discurso xenófobo, euroescéptico e identitario que ha cautivado a parte de los austriacos. Con solo 45 años, el candidato del FPÖ es una voz calmada, carismática y simpática que se aleja del histrionismo y ha hecho más digerible la ultraderecha. A pesar de presentarse como una figura de consenso, ha remarcado que como presidente trabajará “primero para los austríacos” y ha descalificado constantemente el islam. Camina con un bastón debido a un accidente y siempre lleva un arma en su bolsillo.