CRISIS OLÍMPICA

La llama olímpica llega a un Brasil al borde del precipicio

La presidenta Rousseff intenta aparentar normalidad aunque destaca la difícil situación de su gobierno

Los primeros compases de la antorcha olímpica en Brasilia estuvieron marcados por las manifestaciones

El presidente del Comite Olímpico Brasileño, Carlos Arthur Nuzman, transporta la linterna con el fuego olímpico a su llegada a Brasilia. / AFP / EVARISTO SA

Poco después de las siete de la mañana, un avión con el emblema “Sueño olímpico a bordo” ha aterrizado en el aeropuerto internacional de Brasilia. La capital de la mayor democracia de América Latina daba así su bienvenida a la llama olímpica que, el próximo 5 de agosto, iluminará los primeros Juegos Olímpicos en un país de Sudamérica.

Vestida con un llamativo traje de chaqueta con los colores de Brasil, la sonriente presidenta Dilma Rousseff encendido la pira olímpica junto al presidente del Comité Organizador de Río 2016, Carlos Nuzman, y la atleta olímpica Fabiana Claudino. Precisamente, ha sido la doble medallista olímpica de voleibol, con sendas medallas de oro en Pekín 2008 y Londres 2012, la que ha recorrido los primeros metros que separan el Palacio de Planalto de las calles de la capital.

Fue aquí donde la aparente normalidad del acto olímpico ha acabado. Rodeada de una decena de policías, la bella atleta ha tenido que esquivar las pancartas de los manifestantes a favor y en contra del “impeachment” o juicio político a la presidenta Rousseff. “El Olimpeachment ya está aquí”, rezaba una de las mayores pancartas mientras que un manifestante se esforzaba por correr al ritmo de la comitiva con un cartel de “No habrá Golpe”

Solamente una muestra de la tensión que se respira estos días en el país. Lo cierto es que en apenas una semana el Senado de Brasil podría decidir la suspensión del mandato presidencial de Rousseff por espacio de 180 días. El próximo viernes, los 21 miembros de la comisión especial del Senado deberán votar el informe que recomendará la continuidad o no del proceso en la Cámara alta del Congreso Nacional.

Sin embargo, será el próximo día 11 de mayo cuando los 81 senadores tendrán la última palabra sobre la presidencia de la líder del Partido de los Trabajadores (PT). Una mayoría simple a favor del “impeachment” dejaría al vicepresidente Michel Temer, calificado como el “líder de la conspiración” por Rousseff, como presidente interino de Brasil durante los Juegos Olímpicos de Río 2016. “Estaría muy triste si eso llegase a ocurrir”, reconoció recientemente la “dama de hierro” brasileña en una entrevista con Christiane Amanpour para CNN.

ANTIGUA GUERRILLERA

Pero Rousseff, la presidenta que militó en la guerrilla del Comando de Liberación Nacional, no ha querido dar a la oposición la satisfacción de mostrar su decepción en la ceremonia olímpica. “Brasil está preparado para realizar la mejor edición de los Juegos Olímpicos”, ha dicho la presidenta durante su breve discurso en que ha apuntado, además, que “a pesar de la inestabilidad política, los brasileños serán capaces de convivir en harmonía”.

“Los ojos del mundo están puestos en Brasil y nosotros sabremos estar listos para atender las grandes expectativas”, ha insistido la líder laborista quien, sin embargo, podría perder esta responsabilidad en un tiempo récord. Los rumores sobre el futuro gobierno interino de Michel Temer no han parado de cesar en las últimas semanas mientras que los medios de comunicación han dado por finiquitados los 13 años de gobiernos del Partido de los Trabajadores. No obstante, Rousseff podría estar guardando un as en la manga.

Según anticipó el senador Paulo Paim al diario brasileño 'O Globo', el próximo viernes la presidenta podría enviar al Congreso Nacional una solicitud de enmienda constitucional para permitir el adelantamiento de las elecciones generales a octubre de este mismo año, es decir, justo a los dos años de mandato y coincidiendo con la celebración de elecciones municipales en el país.

Una posibilidad remota, ya que requeriría un apoyo de 308 de los 513 diputados de la Cámara baja, pero que posibilitaría una salida digna a una presidenta cuyo cansancio se hace cada día más evidente a pesar de sus esfuerzos por mantener la sonrisa.

La Fiscalía pide al Supremo que investigue a Lula de Silva

La Fiscalía ha solicitado al Tribunal Supremo de Brasil que investigue al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, a tres ministros del gabinete de Dilma Roussef y otros 27 políticos por su presunta participación en el escándalo de corrupción de Petrobras. Esta petición se suma a la que hizo el pasado lunes para que abriera también una investigació criminal contra el principal líder de la oposición, el senador Aécio Neves. El excandidato presidencial y líder del Partido de la Social Democracia de Brasil (PSDB) se habría beneficiado de los sobornos regulares hechos por la empresa Furnas Centrales Eléctricas.