Belka, una perra embarazada que llevaba dos días sepultaba bajo el pavimento en una ciudad rusa, fue rescatada por un vecino que escuchó los gemidos del animal.
La perra había caído accidentalmente en un agujero abierto en una obras de la calle de la localidad de Voronezh. Los albañiles taparon el socavón sin darse cuenta de la presencia del animal.
GEMIDOS Y LADRIDOS
El pasado 21 de septiembre, Vadim Rustam, un vecino del edificio ante el que estaba la obra, comenzó a preguntarse de dónde venían los ladridos y gemidos de un perro que llevaba horas oyendo.
Tras examinar la zona, logró determinar que el animal estaba bajo los adoquines así que decidió comenzar a levantarlos hasta que apareció la perra.