DESHIELO ENTRE DOS VIEJOS ENEMIGOS

Los republicanos declaran la guerra

Marco Rubio lidera la promesa de bloquear los cambios en el Congreso

Activistas anticastristas gritan contra Obama, ayer en Miami. / AP / ALAN DÍAZ

Descendiente de cubanos emigrados, el senador Marco Rubio es una de las voces más sonoras en el Congreso respecto a la relación de Estados Unidos con Cuba y ayer, tras el anuncio de los pasos hacia la normalización, declaró la guerra. Acusando al presidente de «otra concesión a una tiranía», declaró que hará todo lo posible para frenar los cambios.

«Van a ser dos años interesantes, intentando lograr la nominación de un embajador y la financiación para una embajada», dijo. Sus palabras no escondían la amenaza de un bloqueo a partir de enero, cuando los conservadores toman posesión de la mayoría en las dos cámaras, sin las que Barack Obama tampoco podrá levantar el embargo.

A la crítica de Rubio (que llamó a Obama «el peor negociador que ha ocupado el Despacho Oval») y la de otros republicanos como el presidente de la Cámara baja, John Boehner, se sumaron demócratas vinculados a la comunidad cubana como Bob Menendez, que habló de «precedente extremadamente peligroso».

Con el anuncio de ayer las relaciones de Washington con La Habana han entrado además en la campaña presidencial del 2016 aunque aún no haya candidatos. Rubio es una posibilidad. Y más aún lo es Jeb Bush, que el martes confirmó que estudia presentarse y ayer criticó a Obama asegurando que sus acciones «solo benefician a los odiosos hermanos Castro». En el campo demócrata, Hillary Clinton ha abogado en el pasado por acabar con políticas que en su opinión «han sido un fracaso».

Todos tendrán la vista puesta en los votantes cubanos, aunque el peso político de estos, sobre todo en Florida, está bajando conforme cambia la demografía, hay más jóvenes  y aumenta la presencia de otros grupos como los portorriqueños. Ayer, en Miami, los anticastristas hablaban de «traición» y los moderados daban la bienvenida, no sin cierto escepticismo, al paso dado por Obama.