Elministro de Defensa, jefe del Ejército y actual hombre fuerte de Egipto, elgeneral Abdel Fatah al Sisi, advirtió ayer que las Fuerzas Armadas "no se cruzarán de brazos" mientras sigan lasprotestasen la calle de los seguidores del presidente electo destituido,Mohamed Mursi.
La fuerte presencia militar y policial enEl Cairodisuadió a los manifestantesislamistas, que optaron por cancelar parte de lasmarchasconvocadas desde variasmezquitastras el rezo de la tarde. Al cierre de esta edición no se había informado de víctimas mortales durante la protesta, aunque al menos36 presos murieronen un confuso incidente en unaprisióndeEl Cairoque lapolicíainformó que se trató de unintento de fugaque se impidió congases lacrimógenos.
Ayer fue la primera vez queAl Sisiaparecía en público tras el brutal asalto del pasado miércoles a las dos plazas donde desde hacía semanas acampaban los leales a Mursi, operación militar que se saldó con la muerte de centenares de islamistas. En undiscurso televisadoante losaltos mandosdel Ejército y la policía, el general enfatizó que la violencia "no doblegará al Estado" y que no tolerará "la destrucción y la quema del país" ni "amenazas a la población".
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