Estar en paro y tener dos hijos pequeños que mantener es unasituación límite que llevó a un hombre en Italia arobarproductos de primera necesidad en un supermercado de la ciudad de Siena.El dueño del mercado, que descubrió elhurto,llamó a la policía,aunque según explicó después, sin intención de denunciarle. Elladrón se había llenado los bolsillos de pasta, leche, pañales y alimentos para sus hijos. Los agentes no solo no le detuvieron, sino que pagaron el coste de la mercancía sustraída.
El curioso caso 'del-mundo-al-revés' lo ha publicado este martes la edición digital de el'Corriere Fiorentino', que explica que elladrón, de 27 años, es unegipcio que se encuentra en Italia, junto con su hermano, de 19 años, entró al supermercado a robar varios productos de primera necesidad, pero cuando los dos, por segunda vez, salieron del establecimiento con bolsas, a la vista de toda la clientela, el dueño del local llamó a la autoridad.
Pago de la factura
El propietario de la tienda explicó, según el rotativo, que llamó a los policías no para que intervinieran sino para que aclarasen la situación.
Lapolicía,al comprobar las condiciones del extranjero, decidió pagar la factura al tendero y poner el caso del joven egipcio en manos de los servicios sociales.