La Guardia Urbana de L'Hospitalet de Llobregat puso el año pasado un total de 750 denuncias a conductores de patinetes eléctricos que circulaban de forma incorrecta. La mayoría de casos, sancionados con multas de entre 80 y 200 euros, fueron por no respetar el semáforo rojo, conducir de manera negligente o usar auriculares. También fueron recurrentes las infracciones por circular por zona peatonal o aceras, ir más de una persona en el vehículo, no obedecer la señal de dirección prohibida, no llevar luces de noche y circular en zigzag entre vehículos o peatones.
Más puntuales han sido las sanciones de 500 euros por conducir de forma temeraria o en sentido contrario, o las de 1.000 euros a conductores que iban bebidos o drogados.
El Ayuntamiento destaca que la Guardia Urbana desarrolla sistemáticamente varias campañas y controles sobre el uso de los patinetes eléctricos. Durante el último trimestre de 2020, los agentes detuvieron 403 patinetes, de los que 101 conductores terminaron denunciados y 176 recibieron una advertencia de sanción.
Nuevo reglamento estatal
El consistorio recuerda que el 2 de enero entró en vigor el nuevo reglamento estatal de circulación de los patinetes eléctricos. Con la nueva normativa, se prohíbe el uso por aceras y zonas peatonales, se limita el uso a un solo ocupante y se limita la velocidad a 25 km/h.
Además, los conductores no pueden usar teléfonos móviles ni auriculares y están obligados a pasar los controles de alcoholemia y drogas.
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