Dinamarca sigue en 'shock' tras el anuncio de abdicación de la reina Margarita en su discurso de Año Nuevo, en el que avanzó que dejará el trono el próximo 14 de enero, y por tanto, que será su primogénito, el heredero Federico, el que lo ocupe a partir de entones. Aunque la monarca ya ha cumplico 83 años y tiene el año pasado fue operada de sus problemas de espalda, hacía siglos que un rey danés no abandonaba el cargo. La última renuncia de un monarca vikingo se remonta a 1523, con el rey Christian II, según ha explicado el historiador Lars Hovbakke Sorensen en el diario 'Ekstra Bladet'. La ceremonia de sucesión de aquí a dos domingos será también toda una sorpresa para los conciudadanos de Margarita, pues no existe tradición ni casi literatura sobre ese ceremonial.