Un fenómeno en alza

De Obregón a Rocío Carrasco: los peligros de abrir debates sociales con famosos

Los sociólogos hablan de los pros y los contras de que las 'celebrities' sirvan para introducir temas incluso en la agenda política

Ana Obregón, en una imagen de archivo / Europa Press

Desde hace un tiempo, algunas revelaciones de los famosos están provocando auténticos huracanes mediáticos, generando intensos debates sociales sobre temas controvertidos que hasta ahora habían sido más o menos tabú. Es lo que ha pasado hace nada con el 'boom' que ha generado la noticia de que Ana Obregón ha recurrido a la gestación subrogada para convertirse en abuela tres años después de la muerte de su hijo. Pero casos como la docuserie de Rocío Carrasco, el suicidio de Verónica Forqué y el vídeo sexual de Santi Millán también han servido para que se hablara sin tapujos de la violencia machista, de la salud mental y de que la filtración de imágenes íntimas sin el consentimiento de sus protagonistas es un delito. Los 'vips' están abriendo melones que antes permanecían sellados a cal y canto. ¿Por qué ocurre ahora este fenómeno? ¿Es positivo que se produzca o a veces puede normalizar o incluso banalizar delitos e ilegalidades? ¿Puede ser contraproducente que estos temas salten incluso a la agenda política precisamente a través de las 'celebrities'?