El príncipe Andrés de York le ha obsequiado a su madre con un perrito corgi coincidiendo con la celebración oficial de su cumpleaños durante el pasado fin de semana, el desfile de 'Trooping the Colour', que este año ha tenido que ser en una versión reducida en el castillo de Windsor debido a las las restricciones por el coronavirus. La fiesta, una de las preferidas de Isabel II, que cumplió los 95 el pasado 21 de abril, vino a poner un poco de alegría en la vida de la monarca, que ha pasado unos difíciles meses tras la muerte hace dos meses de su esposo, el duque de Edimburgo.
Dos días antes, su hijo Andrés y sus nietas, las princesas Beatriz y Eugenia, le entregaron un regalo muy especial a la monarca para ayudar a subirle la moral: un cachorro de corgi de seis semanas. Un gesto entrañable, que además coincidía con el día en que el príncipe Felipe hubiera cumplido 100 años, ha explicado el tabloide 'The Sun'.
Su raza favorita desde la infancia
La reina Isabel II es una apasionada de los perros. Desde niña se ha fotografiado con ellos, mostrando siempre su lado más sensible y cariñoso. en especial con los corgis, raza que su padre, el rey Jorge VI, introdujo en palacio. Ella tuvo su primer corgi a los 18 años -se llamaba 'Susan'-, y desde entonces ha tenido más de 30 mascotas que la han acompañado en los momentos más importantes de su vida: se las llevó de viaje en la luna de miel, posaron en el jardín con cada uno de sus hijos, o hasta una de ellas, 'Willow' -el último descendiente de 'Susan'-, se hizo famoso por aparecer con ella en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Justo hace un mes que murió 'Fergus', uno de los dos últimos perros nuevos que el duque de York y sus hijas también le habían regalado a la reina (el otro, que aún vive, se llama 'Muick'). La muerte del cachorro ocurrió poco más de un mes después que la del duque de Edimburgo, y se llegó a especular que Isabel II, "devastada" por la pérdida también del animal, según la prensa, ya no querría adoptar más mascotas.
Sin embargo, ahora tal como publica 'The Sun', citando a trabajadores de palacio, la reina "está absolutamente encantada de tener un nuevo corgi. Estaba angustiada cuando 'Fergus' murió repentinamente, pero este nuevo perro será la compañía perfecta para 'Muick' en el futuro".
Con gran dolor de su corazón, en noviembre del 2019 Isabel II tuvo que apartar de sus deberes públicos a su hijo predilecto, acosado por su relación con el turbio magnate y proxeneta Jeffrey Epstein. El duque de York trató de lavar su imagen en una catastrófica entrevista en la BBC donde se contradecía y lo negaba todo. Un año después del escándalo, Virginia Roberts, una de las víctimas del traficante que acabó muerto en su celda, acusó al 'royal' de acostarse con ella cuando tenía 17 años.