El príncipe Enrique de Gales ha visitado Patan Durbar, en Katmandú, un campamento en el Nepal, donde numerosas familias se han quedado sin hogar por el devastador terremoto que tuvo lugar el año pasado, además de templos y palacios que resultaron dañados por el desastre sísmico.
Por el momento, el nieto de Isabel II, se ha reunido con Bidya Devi Bhandari, la presidenta del país, para hablar sobre el proceso de recuperación de la zona tras el terremoto que azotó el país en abril del 2015.
Este lunes, en el segundo día de la visita oficial de cinco días por el Nepal, el hijo menor del príncipe Carlos de Inglaterra, de 31 años, ha hablado con diversas familias que viven en el campamento Bhaktapur, justo al este de la capital Katmandú, donde varios grupos de habitantes han aprovechado para ataviarlo con distintos collares de flores y el gorro tradicional nepalí, tras pintar en su frente una marca roja.