El príncipe Andrés embistió a su todoterreno contra la valla metálica que rodea la finca de Windsor este domingo. El hijo de la reina Isabel lo hizo a propósito, según ha desvelado a 'The Sun' un empleado de la casa real que ha querido mantener su anonimato. El exmarido de Sarah Ferguson quería coger un atajo para llegar a Windsor Lodge, la casa que habita en la finca de la familia real y trató de abrirse paso al volante de su Range Rover. 

"Por alguna razón, los sensores no funcionaron. En lugar de entrar por otro lugar que estaba a un kilómetro y medio, decidió embestir con su coche para abrir la puerta", explica el empleado, que asegura que Andrés tiene fama de "ir saltando y brincando con su coche" por la finca.