Ron Wood no es la típica estrella de rock que se esconde en casa para no toparse con fans que le molesten. Al contrario, el stone, que tiene un piso en una finca regia del Eixample derecho de Barcelona desde hace un año, ejerce de vecino con todas las de la ley, e igual aparece en el Rien de Rien para ver un concierto (y agarrar la guitarra y tocar un rato, como hizo en julio pasado) que compra material de pintura al local de Abacus de la calle de Ausiàs March, cerca de su casa, como sucedió el pasado sábado. Allí apareció a última hora de la tarde en busca de unas telas sobre las que pintar, su gran afición. El músico, de 67 años, acudió al autoservicio con su mujer, Sally Humphreys, de 36, y unos amigos con los que venía de visitar una galería de arte. Al ir a pagar, exhibió su simpatía habitual y se dejó hacer una foto que inmortalizó su visita al establecimiento.
EN EL EIXAMPLE
Ron Wood compra en Abacus tela para pintar
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