EL CLUB RECURRIRÁ

El Valencia, tras el cierre parcial de Mestalla: "Es una sanción injusta y desproporcionada"

Vinicius durante una acción del partido contra el Valencia en Mestalla / Reuters

La grada sur de Mestalla, conocida como grada 'Mario Kempes', ha sido cerrada por cinco partidos. El Comité de Competición ha determinado ese castigo, inusual en el fútbol español, tras los gritos racistas que recibió Vinicius procedente de ese fondo sur del recinto valenciano, lo que ha provocado una rotunda respuesta del Valencia,.

El club, en un largo comunicado emitido poco después de la resolución del Comité, ha mostrado "su total desacuerdo e indignación por la injusta y desproporcionada sanción impuesta", al tiempo que desea "denunciar públicamente que en esta resolución del Comité manifiestan pruebas que contradicen lo que dice la Policía Nacional y LaLiga".

El Valencia sostiene que "esta sanción se basa en pruebas que el club no ha podido ver y sin darnos trámite de audiencia" y luego reitera que "ha condenado, condena y condenará de la forma más enérgica cualquier acto de racismo o violencia. Estos comportamientos no tienen cabida en el fútbol ni en la sociedad y seguiremos actuando de la forma más tajante para erradicar esta lacra".

En el comunicado, el club valenciano precisa que "colaborando desde el primer minuto con la Policía y todas las autoridades pertinentes en esclarecer los hechos acontecidos el pasado domingo", además de recordar que "ha aplicado la máxima sanción posible con la expulsión de por vida de nuestro estadio a los aficionados que la Policía ha identificado por sus comportamientos racistas".

No entiende el Valencia ese castigo, que califica de " totalmente injusta y un agravio más en las últimas decisiones disciplinarias que se han tomado en contra del Club", terminando su respuesta oficial reclamando "máximo respeto y rigor por nuestra institución y aficionados".