MADRID - CELTA (2-0)

La crónica del Madrid-Celta: Marco Asensio y Militao abaten a un inofensivo Celta

Vinicius se queja tras recibir una falta en el Madrid-Celta del Bernabéu. / Reuters

Al Real Madrid no le asusta el calendario, aunque Ancelotti preferiría tenerlo todo medido, como le sucede a la maquinaria blanca en el campo. Ante el Celta, la resaca europea se compensó con la efectividad de hombres como Asensio, un proscrito reconvertido a figura fundamental en la temporada blanca de tres frentes, donde los secundarios son imprescindibles.

El balear, ovacionado en el templo de la Castellana, descerrajó al conjunto gallego con un gol al borde del descanso y en la reanudación sirvió un centro para un 2-0 que estrecha las costuras de LaLiga (ocho puntos con el Barça) y mantiene el ritmo competitivo del campeón de Europa.

Cinco cambios de Ancelotti

Es tal la secuencia triunfal madridista que el aficionado de a pie llega al Bernabéu con una secuencia de highlights en la cabeza. Imagina que nada más empezar el partido comenzará a descontar lo que ha pagado por entradas que en el fútbol español son, como mínimo, un concierto de los buenos. Pero la trepidante aventura del Madrid en tres competiciones obliga a esperar. Introdujo cinco cambios Ancelotti con respecto al triunfo en Londres.

Con Nacho en el lateral, Rüdiger en el centro de la defensa, Tchouaméni y Ceballos en el medio; y Asensio en la tripleta atacante. Enfrente, un Celta con bajas importantes en defensa como las de Mingueza, Hugo Mallo y Aidoo, que obligaron a Carvalhal a reformular su propuesta, aunque fue realmente inofensivo. Ganó el Madrid sin despeinarse sobre un césped, el del Bernabéu, que está en un estado lamentable.

Dominio blanco hasta agotar

Porque al Real Madrid, como le viene sucediendo incluso en los grandes bailes europeos, el primer tramo horario le sirve como despertador, al igual que su hinchada, que en LaLiga siempre pierde en decibelios con el sector visitante. Dominó la posesión y acogotó al Celta el conjunto blanco. Sin embargo, el cuadro vigués se liberaba de la mordaza bajo la batuta de Gabri Veiga, uno de los grandes objetos de deseo madridistas, pero que parece tener contadas las horas en España, con la Premier, y en concreto el City, haciéndole un marcaje férreo.

Kevin, Tapia. Tapia, Kevin. La primera parte acabó convirtiéndose en una empresa de reformas donde los zagueros celestes intentaban perseguir el balón que solo lograron mantener durante una fase. Benzema intentó una inusual falta a lo 'panenka'. Ceballos se metía hasta la línea de fondo. Camavinga exhibía músculo.

Eran llamadas a un primer gol que acabó llegando al borde del descanso tras una recuperación del galo que devoró el campo para servir a Ceballos, quien regaló un gran pase para Vinicius. El extremo dio un pase atrás que Asensio remató con la zurda. Su disparo se fue al fondo de la red con la ayuda de Javi Galán. El Real Madrid bailaba una precisa muiñeira para poner el viento a su favor.

El factor Militao

El gran problema con Asensio siempre ha sido de expectativas. Tanto las propias como las ajenas. Sin embargo, parece haberse convertido al fin en el jugador número 12 que el Real Madrid necesita. Una asunción de roles que defiende en todas las competiciones. Sus ocho goles en 2023 le convierten en el jugador español que más tantos ha anotado en las cinco grandes ligas de Europa.

Para el Celta era fundamental no sufrir una hemorragia intimidatoria. Iván Villar bloqueó un cabezazo de Benzema a bocajarro, mientras sufría viendo cómo Vinicius alardeaba de regate, exigiendo el máximo a las múltiples marcas que le perseguían. No por repetido resulta menos cierto que al Real Madrid solo pueden tumbarle los genios (como sucedió con Chukwueze).

El Celta tenía varios en sus filas, pero cesados en sus funciones. Aspas, corajoso y tozudo como es, tuvo en sus botas la última gran ocasión. Sin embargo, reforzó al que faltaba: Thibaut Courtois, otro elemento de la fortaleza blanca. Con las armas entregadas por parte de los visitantes, el Bernabéu se dedicó a corear a Ancelotti, Ceballos, Modric... Cualquiera era motivo de adulación en un equipo que campa a sus anchas, a pesar del calendario y de un césped que por el que sí tiene motivos para quejarse.

La ficha del Madrid - Celta (2-0)

Madrid: Courtois, Nacho, Militao, Rüdiger, Camavinga, Ceballos (Modric, m. 81), Tchouaméni, Valverde, Marco Asensio (Lucas Vázquez, m. 76), Benzema y Vinicius (Rodrygo, m. 81).

Celta: Iván Villar, Kevin Vázquez (Medrano, m. 78), Tapia, Unai Núñez, Javi Galán (Swedberg, m. 73), Solari (Franco Cervi, m. 46), Gabri Veiga (Óscar, m. 63), Fran Beltrán, Luca de la Torre, Iago Aspas y Seferovic (Paciencia, m. 63).

Goles: 1-0, Marco Asensio (m. 42); 2-0, Militao (m. 48)

Árbitro: Mateu Lahoz.

Tarjetas amarillas: Kevin Vázquez (m. 19); Ceballos (m. 45+1); Javi Galán (m. 70)