Mbappé despide a Lewandowski con la mayor exhibición del Mundial

qatar desde mi sofa / Emilio Perez de Rozas

Te vas a la cama habiendo visto lo que ha hecho Leo Messi ante Australia, que no es otra cosa que liderar, cargar con una selección que no parece nada del otro mundo, eso sí, muy voluntariosa y motivadísima, y, además, seguir manteniendo el sueño, la ilusión, la esperanza de casi 46 millones argentinos, que solo tienen un dios y es ‘la Pulga’. Eso sí, al apagar la luz de tu mesita de noche piensas que, tal vez, ni siquiera la magia de Messi sea suficiente para que Argentina logre su tercer título mundial, aunque todo puede ser.