Las celebraciones por lavictoria de la selección española se desarrollaron enBarcelona sin apenasincidentes. En laplaza de Espanya se congregaron unas 1.500 personas, según losMossos d'Esquadra, que pasadas la 1.30 de la madrugada comenzaron a regresar a sus casas. Fue en ese momento, cuando ya quedaba solo un grupo de 500 individuos muy afectados por el alcohol cuando se registraron algunos lanzamientos de botellas contra los Mossos, cuyosantidisturbios los abortaron disparando una salva de advertencia.
Finalmente, un individuo fue detenido por arrojar botellas a la línea policial. Además, un asistente fue agredido por otro individuo y un vendedor de latasde cerveza sufrió un intento de agresión. La celebración se desarrolló de forma mucho más pacífica que la del año 2008.