Completamente afónico,Vicente del Bosque ha asumido con naturalidad el espectacular triunfo sobreItalia.Ni la goleada por4-0ni la superiodidad mostrada por la selección han alterado el talantetranquilodel técnico, sereno y feliz con la conquista del trofeo. "Lo dedico al fútbol español y a mi familia", ha dicho Del Bosque, acordándose al mismo tiempo de Villa y Puyol,a quienes no pudo convocar por sus respectivaslesiones.
Del Bosque entiende que España "ha madurado el partido y el triunfo" a partir del primer gol,que ha llegado muy pronto y "ha desgastado mucho a Italia". Ha reconocido que ha disfrutado de un cómodo desenlace de la final porque el tanto deJordi Alba "ha sido definitivo". Sin embargo, no ha regateado elogios a Italia.
"Esto es histórico, hemos hecho algo muygrande", ha dicho Del Bosque, orgulloso, después de las críticas que había recibido por el juego (presuntamente) aburrido de la selección y por elegir aCesccomo delantero centro sin serlo. EnKiev se ha convertido en el segundo entrenador del mundo en encadenar un Mundial y una Eurocopa, como el alemánHelmut Schöen (1972 y 1974). A diferencia de su colega, aquel no tiene una Liga de Campeones, como la que logró Del Bosque con el Madrid.