Dani Alves, ex jugador del Barça, ha celebrado su primer cumpleaños entre barrotes en la cárcel de Brians 2. Lleva desde el pasado 20 de enero en prisión por la presunta violación, el 30 de diciembre, a una mujer en la discoteca Sutton de Barcelona. En su 40 aniversario ha recibido la visita de su exmujer Dinora Santana y los dos hijos de ambos, adolescentes de 15 y 16 años que se desplazaron al penal situado en Sant Esteve Sesrovires (Barcelona). También la modelo Joana Sanz se ha acordado de él. La mujer que contrajo matrimonio con él en 2017 en Formentera no se ha acercado a la cárcel pero le ha enviado un mensaje a través de las redes sociales que ha sorprendido a muchos pues se especulaba con su separación.

El tono del mensaje era muy diferente al que utilizó en marzo cuando la modelo contó a sus seguidores su decisión de poner punto y final a su relación con el exfutbolista y que estaba preparada para "pasar a la siguiente etapa". Este sábado, a través de Instagram Stories en la que compartía una fotografía del deportista calificaba como "un error que salió pagando muy caro" la acusación de violación que impedía a ambos celebrar juntos el cumpleaños del jugador. Y añadía esperar que todo se solucione pronto.

Sanz reconocía haber dado muchas vueltas a la decisión de compartir sus sentimientos en un día como tan señalado con el 40 aniversario de Alves por el miedo a las críticas que podrían surgir a partir de ahora. Y terminaba su mensaje asegurando que siempre estará para apoyar al jugador, aunque de otra forma. Y se despedía con la frase "unconditional love".

Hace menos de un mes escuchó la cuarta declaración distinta del ex del Barça donde volvía a cambiar su versión de los hechos por quinta vez, alegando que todo lo sucedido fue consentido cuando en un principio negó siquiera conocer a la víctima.

El abogado de Alves, Cristóbal Martell ha pedido dos veces la libertad del jugador. La Fiscalía Provincial de Barcelona se ha opuesto a esta petición al entender que subsiste el riesgo de fuga.