Al acabar la final del Mundial de Qatar 2022, que ha enfrentado a Argentina y Francia -y que ha ganado la albiceleste, capitaneada por Leo Messi, en la tanda de penaltis-, el equipo arbitral ha subido a la tribuna a recibir una medalla y la felicitación de las autoridades, entre ellos, el presidente de la FIFA Gianni Infantino, el emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani, y el presidente de Francia, Emmanuel Macron.
La realización ha evitado mostrar el momento en que el emir debía estrechar la mano a la única arbitra del encuentro, la auxiliar estadounidense Kathryn Nesbitt.
Pero en las imágenes se puede ver cómo el emir hace el gesto de extender la mano (aunque la realización no enfoca el momento) y, posteriormente, le coloca la medalla y le da unos golpecitos en el brazo.
Sin embargo, muchos son los que en Twitter han puesto en duda que le estrechara la mano. Como sucedió este sábado, durante el encuentro que enfrentó a Croacia y Marruecos por el tercer y cuarto puesto, cuando el emir evitó saludar a la asistente suplente brasileña Neuza Back.
Lo cierto es que hay muchos seguidores del islam, la religión que profesa el emir de Qatar y que es mayoritaria en el país, que tienen una actitud discriminatoria hacia las mujeres, basada en una interpretación ultraconservadora del Corán, que impide que un hombre salude o toque a una mujer en público. Y a la inversa: una mujer tampoco debe dejar que un hombre la salude dándole la mano y, mucho menos, dos besos.