En la calle Sagasta número 2 de Cádiz hay un pequeño restaurante de comida rápida. Sirve pizzas, hamburguesas, perritos, bocadillos... Nada fuera de lo normal. Solo que su dueño tiró de la popular guasa gaditana al darle nombre y lo llamó Menoc Donald. Desde hace 34 años, al local le ha ido bien y se ha consagrado entre los habituales y los turistas. Hasta que hace unas semanas recibió un burofax de McDonald's con una petición supuestamente "amistosa": la multinacional le instaba a cambiar de nombre porque era muy parecido al suyo y, por tanto, dejaba entrever una vulneración de los derechos de autor. Tal cual. ¿Cómo un negocio familiar le gana la partida a un gigante internacional? El actual dueño, José Antonio Calvo, no opuso resistencia. Claudicó y el local tiene un nuevo rótulo a su pesar: Menoc Burger.

Menoc Donald no es la primera víctima de McDonald's. La cadena de 'fast food' nació del exitoso negocio que arrancaron los hermanos Dick y Mac McDonald en California en los años 40 del siglo pasado. Luego llegó el empresario Ray Kroc, que se asoció con ellos para supervisar la expansión nacional de la hamburguesería, y acabó 'robándoles' el negocio por 2,7 millones de dólares. Además, les obligó a rebautizar sus establecimientos, que pasaron a llamarse The Big M.

"Teníamos las de perder"

Ahora ha vuelto a pasar. "Recibimos un burofax de un bufete de abogados de Madrid que representaba a McDonald's pidiéndonos de forma amistosa que cambiáramos el nombre del local", contó el propietario a Canal Sur y 'Diario de Cádiz'. Era una lucha perdida. "Evidentemente, nos pusimos manos a la obra porque sabemos que teníamos las de perder si no lo hacíamos", confesó.

Calvo explicó que en cuestión de días cambiaron los rótulos. "Empezamos cambiando el cartel de afuera, otro de dentro, el rotulado de la moto con la que llevamos la comida a domicilio, dar de baja los perfiles en internet...", precisó resignado el dueño del ya Menoc Burger. Para colmo, todo corrió de su bolsillo.

Cambios rápidos y supervisados

Por si todo esto no fuera suficiente, el despacho de abogados supervisó los cambios. "El 7 de noviembre, recibimos la última comunicación dándonos el visto bueno a todo. Tampoco es que nos dieran un plazo de tiempo, ni nos atosigaran, pero sabíamos que era mejor arreglar esto cuanto antes", detalló el propietario el pasado 12 de noviembre.

McDonald's ha ganado la batalla empresarial, pero no la mediática. A los clientes de esta hamburguesería y pizzería no les ha gustado nada cambio impuesto. Tampoco a los usuarios de las redes sociales. Al enterarse del asunto, los peces pequeños se juntaron en un gran banco para luchar contra el tiburón.