La final de la Champions League entre el Liverpool y el Tottenham estuvo llena de emociones, que se desataron especialmente tras el pitido final con el triunfo de los 'reds'. Uno de los momentos más conmovedores lo protagonizó el capitán del equipo que entrena Jürgen Klopp, Jordan Henderson, que acudió a un extremo del césped del estadio Wanda Metropolitano para fundirse en un sobrecogedor abrazo con su padre, Brian.
Jordan Henderson y su padre celebran la Champions en el Wanda Metropolitano. /
La familia Henderson vive momentos de amargura porque Brian sufre un cáncer de garganta del que se encuentra en tratamiento. Se desplazó hasta Madrid para ver la final de su hijo, y al final pudieron celebrar juntos el triunfo que se le había negado un año antes al Liverpool. Jordan Henderson estruja a su padre y no puede contener un llanto lleno de emoción que pone los pelos de punta.