El amor se elige (y se demuestra), parece contar la historia que conmueve Twitter esta semana. Viene de la mano de la tuitera @MadeInMartinez, que en un hilo narra cómo sus padres vivieron una separación física en los años sesenta, Madrid-Barcelona, cuando no había tantas conexiones ni tanta facilidad para viajar e incluso hablar con frecuencia.

A su padre le habían ofrecido un ascenso en la empresa. Con tres hijos, no podía pensárselo. Pero suponía un cambio radical en sus vidas, ya que él tenía que mudarse a Barcelona y la familia se quedaba en Madrid. En los tiempos en los que no había Internet, el teléfono era caro y no podías coger un AVE. 

Su padre no estaba dispuesto a perder el contacto con su familia. Se alojó una pensión y trabajó además como camarero en un local para ganar más dinero para la familia. Vivía de las dietas que le pagaba la empresa, así que mandaba a su mujer y sus hijos dos sueldos íntegros. Cada noche, escribía una carta a su mujer.

Pero aunque tenía otros compañeros en la misma situación, él siempre fue la excepción. Quedaban para verse, comer, tomar algo... Hasta que un día entraron a un club donde varias mujeres se les acercaron al entrar. "Señoritas", dice. Sus compañeros se fueron a los reservados con ellas.

Él se tomó un café y jugó al paintball. Y eso se convirtió casi en una costumbre.

Uno  de esos sábados, mientras tomaba un café y escribía una carta para su mujer, una de las mujeres se le acercó y preguntó. Ella confesó que creía que era "marica", pero que le alegraba saber que había hombres que respetaban a sus esposas. 

Acabó escribiendo también para esas mujeres. Y ellas le tenían mucha estima. Aunque con sus compañeros la cosa era diferente, y siempre tenía que aguantar bromas. 

Tras contar esta emotiva historia en la que recordó a su padre y viendo la influencia de lo que narra en la gente, esta tuitera aprovechó para lanzar un mensaje para vivir con amor.