La modelo rusa Katerina Laktionova, de 27 años de edad, padecía anorexia, enfermedad que la acabó matando de hambre en Italia. Y a su madre, de 48 años, no se le ocurrió otra cosa que meter sus restos mortales en una maleta y lanzarla al mar Adriático en Rimini (Italia), localidad en la que había trabajado como enfermera, según informa el diario 'Il Corriere della Sera'Il Corriere della Sera. Posteriormente, la mujer regresó a Rusia en avión.
El cuerpo de la joven fue encontrado en esa localidad italiana el pasado día 25 y los resultados de la autopsia indicaron que la joven había muerto de hambre días antes. Tras investigar, la policía descubrió que la modelo pidió a las autoridades en febrero quedarse en Italia, alegando que estaba enferma y que necesitaba "tratarse" de su enfermedad.
UNA SEMANA ANTES
La investigación también desveló que la joven había pasado sus últimos días tumbada en la cama en la oscuridad, y se cree que murió al menos una semana antes de que la pusieran en la maleta y de que su cuerpo fuera lanzado al mar.
La madre confesó llorosa a las autoridades rusas que su hija estaba "muerta. La cuidé durante días, y [cuando murió] me volví loca, la encerré en una maleta y la lancé al agua". Y añadió que se había quedado el cadáver una semana antes de lanzarlo al agua, informa el diario 'Daily Mail'Daily Mail.