Que la letra con sangre entra es un refrán que este padre chino parece tener muy interiorizado, pues no se le ha ocurrido mejor forma de enseñar a su vástago a nadar que lanzarlo directamente al agua.
El pequeño no deja de llorar en todo momento, como se puede comprobar en las imágenes, publicadas por el diario británico 'Daily mail': llora y grita de miedo mientras su padre lo agarra y sigue llorando cuando consigue sacar la cabeza fuera del agua tras ser lanzado.
Según este diario, las personas que han visto el vídeo han catalogado el acto de inhumano y aseguran que esa no es la forma correcta de enseñarle a nadar a un niño.