El líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, ha comparecido tras la reunión de la cúpula de CiU para lanzar un doble mensaje. Primero, el resultado de los nacionalistas en las elecciones europeas de este domingo es "bueno" pese a haber quedado por detrás de ERC, un hecho que atribuyen al desgaste que acusan todos los gobiernos. Y segundo: el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, debe tomar nota y mover ficha de una vez con Catalunya. "El Estado no puede quedarse ciego y sordo", ha advertido.
El dirigente democristiano ha negado que el 'president', Artur Mas, quede debilitado con este resultado y ha insistido en que la puerta sigue abierta para que ERC entre en el Govern.