Un acuerdo entre Esplugues y Visoren abre camino contra los suministros “abusivos” en alquileres protegidos

La contienda que desde principios de año permanece abierta entre varios ayuntamientos catalanes liderados por el de Esplugues de Llobregat y Visoren, gestora de alquileres de protección oficial en los municipios, vislumbra su fin. Los consistorios con vecinos afectados llevan todo este 2023 a las bravas con la gestora a raíz de denuncias por facturas de gas y agua “abusivas” en las viviendas de las 311 familias de todas las ciudades implicadas, entre las que se hallan también Tiana, Canet, Sant Fost de Campsentelles, Calaf, Bigues i Riells y Palafolls. Estos municipios llegaron a solicitar una auditoría de la gestión de Visoren e incluso, en el caso de Esplugues, ordenaron a la empresa suspender cautelarmente el cobro de suministros. Desde entonces, la predisposición de la compañía a negociar una solución ha ido aumentando: "Al principio, la empresa hizo muchas exigencias y no daba el brazo a torcer. Con el tiempo, fueron cediendo, ya que no tenían argumentos", explican a este diario fuentes municipales de Esplugues. Las mismas fuentes añaden que "entre otros errores, la empresa falló en la comunicación y la transparencia con los vecinos". Además de las subidas injustificadas y retroactivas, "los vecinos no tenían acceso al cuarto de contadores", lo que hizo aumentar la suspicacia y las desconfianzas. Nuevas tarifas Según ha podido saber EL PERIÓDICO, a principios de este mes de noviembre el Ayuntamiento de Esplugues y Visoren han llegado a un acuerdo en torno a nuevas tarifas que buscan terminar con los perjuicios para los vecinos en cuanto a los suministros que en la ciudad del Baix Llobregat afectan a tres bloques de viviendas de protección oficial. En el contexto de las nuevas tarifas, la previsión en Esplugues es que la sesentena de familias que viven en las calles Juli Garreta, Gaspar Fàbregas i Roses y Josep Maria Ventura pasen a pagar una cuota fija (que incluye el mantenimiento de instalaciones o las lecturas de contadores) mensual de 28,37 €, que incorpora el incremento del 5,7% del Índice de Precios de Consumo (IPC) interanual de 2022. En cuanto al componente variable que completa las facturas, la nueva tarifa marca el precio del suministro de agua caliente sanitaria en los 15,91 euros el metro cúbico, y el precio del gas de calefacción en 0,168 euros por kilovatio / hora. Se abre la vía a otros municipios El pacto despeja el camino para que las otras ciudades, a las que Visoren ha propuesto ya también nuevas tarifas, se sumen a estas ententes que supondrían el desenlace de la polémica pugna: "Durante los meses de septiembre y octubre se enviaron las tarifas actualizadas de ACS [agua caliente sanitaria] y calefacción a los vecinos de las 311 viviendas de las distintas promociones", asegura a EL PERIÓDICO el responsable de Gestión de Visoren, Joan Olivart, y añade que "las actualizaciones de dichas tarifas fueron informadas, entre los meses de mayo y junio, a los ayuntamientos correspondientes". Además del caso de Esplugues, fuentes conocedoras de la controversia confirman a este diario que de cara a la semana próxima hay prevista una reunión entre Visoren y el Ayuntamiento de Tiana, otro de los municipios con vecinos en pie de guerra, cuyo alcalde, Isaac Salvatierra, llegó a denunciar que la empresa quisiera implementar “un aumento encubierto del alquiler de viviendas por una vía secundaria”. Visoren, a través de su filial Sermavi SL, envió a finales de septiembre al consistorio del Maresme las nuevas tarifas aplicables a partir de los recibos de noviembre, configuradas por una tarifa fija de 21,03 € que incluye la subida del 5,7% del IPC interanual del 2022 y dos tarifas variables, una para el precio de la calefacción (0,169 € kW/h) y otra para el agua caliente sanitaria (13,18 m³). Pese a la estipulación de estas tarifas por parte de la empresa vía carta, el consistorio está todavía pendiente de pronunciarse al respecto, sin que todavía haya cristalizado pacto entre la administración local y la empresa, como sí ha ocurrido en Esplugues. Incrementos del 278% A la espera de la reunión Visoren-Tiana, las nuevas tarifas propuestas por la gestora visibilizan un sensible aminoramiento con relación a las cuotas objeto del conflicto, que en diciembre del 2022 proyectaban una subida de ni más ni menos que del 278% apelando a los “fuertes incrementos en el precio de gas y electricidad” durante el 2022 (en el contexto de la guerra de Ucrania), según consta en cartas a los vecinos consultadas por este diario. Así, si en diciembre del 2022 Visoren preveía cobrar a un vecino de Tiana un 0,25 € por Kw/h de calefacción y unos 27,2 €/m³ de agua caliente sanitaria, estas tarifas se reducen en la actualidad a 0,169 € kW/h y 13,18 m³ respectivamente, además de la actualización de la cuota fija con relación al IPC. Cuando los ayuntamientos se implicaron en el caso, detectaron incrementos en las tarifas de los vecinos que iban de los 1.000 a los 3.500 €. Es el caso de D. B. D., un vecino cuya factura contemplaba una regularización de 1.190 € entre enero y noviembre del 2022, tal y como ha podido consultar este diario. En aquella ocasión, diversos consistorios (Esplugues, Tiana y Sant Fost de Campsentelles entre ellos) solicitaron un informe jurídico al que ha tenido acceso este diario y que, pese a avalar la actualización de la tarifa en consonancia al incremento del IPC, se oponía frontalmente a las refacturaciones con carácter retroactivo que pretendía Visoren por considerarlas “abusivas, irregulares e ilícitas”. Lee todas las noticias de Esplugues en EL PERIÓDICO Esplugues

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