La noche de Sant Joan es la más corta pero también una de las más esperadas del año. Cada ciudad se vuelca, a su manera y con sus costumbres, la mayoría compartidas, con una celebración en la que, si algo no puede faltar, es el fuego. Un fuego que, en Esplugues, llegará el domingo a las seis de la tarde, hora en la que lo hará la ‘Flama del Canigó’.

Será entonces cuando, en compañía de la Colla de Bastoners de Esplugues, se encenderá la hoguera en el Parc Pou d’en Félix y en los jardines del Casal de Cultura Robert Brillas, y cuando darán el pistoletazo de salida las verbenas organizadas en diferentes barrios de la ciudad por las asociaciones de vecinos y entidades locales.

El Centre Excursionista de la entidad Espluga Viva será de nuevo la encargada de hacer bajar la llama de la montaña del Canigó, que habrán ido a buscar previamente la noche anterior, y que traspasará buena parte de los municipios del Baix Llobregat.

Una llama que trasladarán, junto a la agrupación escolta Espluga Viva, la Colla de Castellers y el Ball de Diables al Parc del Pou d’en Fèlix, en un acto al que seguirán la lectura de un manifiesto y el sonido de las grallas, que darán finalmente paso a las diferentes verbenas de barrio.

Así, se realizarán fiestas en los barrios de Can Clota; una en el local de la Asociación Cultural Andaluza de Esplugues (ACAE) y otra en la plaza del Taxi; La Plana -rambla del Carme-, en Can Vidalet -plaza Macael- y en el del Centre, en frente de la pista municipal de L’Avenç.

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