Muchos coincidiremos en que no son los mejores los que nos gobiernan. Sin embargo, a pesar de todos los errores cometidos, muchos siguen llevando la venda en los ojos. Y hablo de tapar errores con otros errores, para mantener el pulso político entre comunidades, agravado en Catalunya por la deriva independentista.
Entretodos
Cualquier excusa en buena para desviar la atención. Ahora, la última decisión afecta a muchos ciudadanos catalanes cívicos a los que nos obligan a taparnos media cara, cuando ya manteníamos las distancias de seguridad para no contagiar, ni contagiarnos. Y la pregunta es clara y la respuesta es visible: ¿Por qué los presentadores de televisión no trabajan con la mascarilla puesta? ¿Será porque mantienen la distancia de seguridad? Si tan preocupados están los mandatarios catalanes en la protección, la nueva pregunta es: ¿piensan en el turismo cuando nos obligan, a todos, a mantener unas condiciones frente al virus que no recomiendan ni muchos expertos, ni la propia OMS?
Si realmente estamos ante decisiones políticas erróneas, enfrentadas a cuestiones sanitarias necesarias, que solo se toman para desviar la atención de la mala organización interna de muchos departamentos externos a Salut como el de inmigración, vivimos sin libertad por culpa de la pésima cúpula política.