Comparando una factura de 2020 con la última, he de pagar 3,02 euros más. Si le añado los 4,42 de IVA reducido, 7,44 euros de incremento. Casi 90 euros al año. ¡Menudo atraco! Y los políticos no hacen nada. Ni los de ahora ni los de antes. El lobi eléctrico es demasiado poderoso. El consumidor apechuga, baja la cabeza y paga.
Se vacían pantanos, se paran generadores eólicos y ellos, los poderosos, ganan. El consumidor pierde y lo peor es que calla, no se manifiesta. Como en tiempos de Franco. ¿Han de ser los franceses quienes nos tengan que enseñar a resolver estos problemas?