Pedro Sánchez se queda. Es una decisión valiente, pero lo más importante de esta decisión es la firmeza de un político que cree en la democracia y que está dispuesto a defenderla.
Entretodos
Hoy, la democracia sale más reforzada, habiendo negado el triunfo a todos aquellos políticos y medios de comunicación que con su oscurantismo, sus mentiras y sus odios pretenden acabar con la democracia y con el Estado de derecho.
De toda esta situación tenemos qué sacar una conclusión necesaria: no podemos permitir que aquellos que utilizan la democracia, sin creer en ella, consigan sus objetivos.
Nuestro país ha sido atacado por estos grupos antidemocráticos y hemos vencido hoy, por eso es importante que no olvidemos la lección, para que mañana podamos seguir victoriosos, o mejor aún, que no demos la oportunidad para que se vuelva a repetir esta situación.
Pedro Sánchez no es imprescindible, como no lo es nadie, pero hoy es más necesario que nunca.