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¿Hacia unas nuevas elecciones?

El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, en la Moncloa. / JUAN MANUEL PRATS

A la vista de los resultados de este 26-J, ya sabemos para qué han servido estas elecciones: para que el Partido Popular haya ganado 700.000 votos y 14 diputados; que Unidos Podemos pierda algo más un millón de votos y se quede con los mismos 71 diputados que ya tenía; para que el PSOE pierda cinco diputados y algo más de 100.000 votos; y Ciudadanos pierda ocho y 376.000 votos. O sea, que ha servido para reforzar al PP y debilitar a la teórica izquierda. Pero sobre todo han servido para que el fantasma de unas nuevas elecciones siga rondando por las esquinas políticas.

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El Partido Popular sigue teniendo exactamente el mismo problema: nadie quiere pactar con él mientras lo dirijan Rajoy y sus más próximos, contaminados por los innumerables casos de corrupción y los duros recortes sociales (y de derechos y libertades). Y difícilmente aceptará un PP vencedor y reforzado que le pongan como condición que Rajoy renuncie.

PSOE y Unidos Podemos no suman lo suficiente si no es con el apoyo explícito de ERC, CDC y PNV, un pentapartido (sin contar que UP es en sí mismo una coalición de nueve partidos) con escasísimas posibilidades de prosperar. Las rencillas y las cuentas pendientes de ambos, por una parte, y las reivindicaciones soberanistas por otra, hacen aún más inviable el acuerdo. Y PSOE y Ciudadanos tienen entre ambos menos escaños que el PP, de manera que esa opción está descartada de antemano.

Las únicas salidas factibles pasan por un gobierno del Partido Popular gracias a la abstención de PSOE (137 sí/ 85 abstención/ 128 no) o de PSOE y C's (137 sí/ 117 abstención / 96 no), pero por el momento nadie está dispuesto a darle el gobierno al Partido Popular, ni directa ni indirectamente. Así que, o Rajoy acepta irse, o PSOE y Ciudadanos cambian de criterio o nos vamos derechos otra vez a elecciones en otoño, porque bien pudiera ocurrir que nadie aceptase presentarse a la investidura como Rajoy hizo en enero sin los apoyos suficientes y, a la vez, nadie los consiguiera tener.