Creo que el Día de la madre, del padre, de los enamorados..., no son más que fiestas comerciales pero al mismo tiempo, cada año, llegado el día, no puedo evitar que mis pensamientos se concentren en esa dirección y siempre hago lo mismo, justo después de pensar en mi vida, ya sea con mi madre, mi padre.. Pienso en algo relacionado con ello e inspirador.

Este año no he podido evitar pensar en Natalia y su terrible historia, una madre chimpancé del zoo de Valencia que lleva portando en sus brazos a su bebé muerto desde febrero, así está pasando su duelo y se está respetando su gran dolor. Es así, a través de este chimpancé que intento imaginarme el inmenso dolor de una madre por la pérdida de sus hijos en cualquier circunstancia, pero quiero mencionar dos casos especiales por su gran inhumanidad: los hij@s muertos por violencia vicaria debido al odio y sed de venganza hacia sus madres y todos los niños y niñas víctimas inocentes de crueles e injustas guerras.

Natalia somos todas, y aunque no sea humana representa claramente el dolor de una madre.